El “error inexcusable” de un fiscal que permitió que se perpetuara un abuso

Semanas atrás, el hombre de 56 años procesado por violar durante más de 12 años a su hija en Rivera se suicidó en la cárcel. La jueza Noelia Sánchez lo había procesado por violación e incesto, en un caso que tuvo una dura polémica debido a que la causa ya se había indagado y archivado en el 2010 y 2011.

La Suprema Corte de Justicia pidió ayer al juez de Rivera Gustavo Iribarren un informe sobre su actuación en 2010, cuando archivó una denuncia contra el hombre que abusaba de su hija y que recién fue enviado a la cárcel en 2016.

Según informó este lunes, la Suprema Corte dio a Iribarren un plazo de 72 horas para presentar ese informe con las fundamentaciones de su actuación. En el comunicado, la SCJ consigna que en su momento el magistrado archivo la causa atendiendo que "tanto la adolescente como su madre no denunciaron abuso alguno y tampoco se recabaron datos de personas que corroboraran la existencia de un rumor sobre la posible relación incestuosa, sin perjuicio de prueba solicitada por el Ministerio Público".

La polémica opinión del fiscal

En su comunicado, la Suprema Corte recuerda que el caso volvió a ser archivado en 2011 por otra jueza, aunque esta vez a pedido del fiscal Letrado Dr. Ricardo Chiecchi Rostan, que entendió que se trataba de un caso de incesto que "por carecer de la nota de escándalo público exigida por el tipo penal, no es delito" y sostuvo que no había pruebas de que hubiera "violencia en la relación sexual de autos".

Con respecto a esa actuación, la Suprema Corte de Justicia aclaró que la opinión del fiscal "es de aceptación obligatoria para el juez de la causa" y que si un fiscal pide el archivo de una causa, "el juez solamente puede aceptar lo pedido por el Ministerio Público". Por tanto, la jueza que archivó la causa por segunda vez no tuvo responsabilidad en el hecho.

Error inexcusable

Pero la actitud del fiscal Chiecchi fue repudiada este lunes por el fiscal de Corte Jorge Díaz, que calificó el pedido de archivo como un "error inexcusable" del fiscal que "determinó que la adolescente siguiera en manos de su abusador por más tiempo aún".

Díaz aclaró que "nunca estuvieron ante un caso de incesto sino de un caso de violación" y explicó que el "incesto como figura típíca requiere relaciones sexuales consensuadas entre personas con un grado de parentesco". Contradiciendo la visión del fiscal Chiecchi, Díaz enfatizó que "nunca se debió hablar de incesto".

Tras confirmar que el fiscal fue trasladado a una fiscalía "de una materia que nada tenga que ver con estos temas", Díaz reconoció: "Este lunes fue uno de esos días en que uno tiene ganas de dejar todo e irse para la casa".